Hijo del pavimento y la luna, el niño estiró sus manos sin saber lo que realmente pedía. Esa noche en vez de las pocas monedas de siempre, se vio sorprendido al recibir un infinito amor. Sólo su madre luna lloró por él, el pavimento ensangrentado susurró un gemido.
Es precioso el texto, estoy encantado con que hayas elegido esta foto.
ResponderEliminargracias.
Gracias!!! La verdad es que la foto es el complemento perfecto para el texto. Es muy urbana, es lo que estaba buscando. Pasaré seguido por tu galería, tienes unas fotografías geniales. Besos!
ResponderEliminarsolo madre luna se conduele del llanto estos niños, solo ella los acurruca en los cartones de sus techos
ResponderEliminarQue lindo eso que dices "solo ella los acurruca en los cartones de sus techos". Estos niños son los hijos de nadie, es decir, los hijos de todos. Son nuestros huérfanos sociales.
ResponderEliminarme recuerda un poco la historia del niño que quería a la luna como su concubina, un poco terrenal, el niño le confesó, le gritó en la cara que el quería más a Sofía.
ResponderEliminary aquí Sofía. heh
ResponderEliminargracias por el link, en poco cambio el template de mi blog y haré lo propio. un gusto pasar por tu blog.
Saludos
que historia es esa??? y con una sofia.... mmmmmm, las sofias son un misterio completo....
ResponderEliminarson huerfanos y fantasmas, la gente no los vé, los patea, los ignora, son pokas las personas ke, x lo menos, intenta un rescate momentaneo
Agg.. que buena historia la de ese niño, habría que buscarla.
ResponderEliminarSaludos Sofía, tu nombre fue anunciado antes de que llegaras.
Besos a todos.
muy mecano, hijo de la luna...
ResponderEliminarjaja pekeña broma,
como todas tus prosas, me encanto
GV